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Reduce la huella de carbono de tu empresa: Crear un futuro más brillante juntos

Sigue leyendo para obtener más información sobre la reducción de la huella de carbono de tu empresa, por qué es importante y cómo personas y organizaciones de todo el mundo se están comprometiendo con esta causa fundamental.

¿Qué es la huella de carbono?

La huella de carbono es el término que se usa para medir las emisiones de dióxido de carbono (CO2) y otros gases de efecto invernadero (GEI) causadas por una persona, organización, producto, servicio o actividad. El tamaño de tu huella de carbono individual depende de una serie de factores, como, entre otros, los medios de transporte, la frecuencia de los viajes, el consumo de energía doméstica u operativa, los hábitos de compra y alimentación, y la producción general de residuos. El tamaño de la huella de carbono de tu empresa depende también de diversos factores, como la administración de los residuos de producción, la eficiencia energética de las oficinas, los métodos de transporte, la producción y el desarrollo sostenibles, etc.

Las huellas de carbono pueden dividirse en dos categorías:

  • Emisiones directas: son las emisiones que proceden de actividades que controlas directamente, como la climatización de una oficina o la gestión de una flota de vehículos.
  • Emisiones indirectas: son las emisiones procedentes de la producción de bienes y servicios que consumes, como la electricidad utilizada para alimentar tu oficina o el agua utilizada para cultivar tus alimentos.

Estados Unidos tiene la mayor huella de carbono en términos de consumo per cápita. El estadounidense medio contribuye con 16 toneladas a la degradación del medio ambiente, lo que supone ocho veces más que la media mundial de cuatro toneladas. A continuación se presentan algunas estadísticas que arrojan luz sobre el alcance y las fuentes primarias de las emisiones de gases de efecto invernadero en Estados Unidos:

  • En 2018, Estados Unidos emitió 6677 millones de toneladas métricas de gases de efecto invernadero procedentes de fuentes relacionadas con la energía. Esto supuso cerca del 14 % de las emisiones totales de dióxido de carbono relacionadas con la energía en el mundo ese año.
  • Alrededor del 81 % de las emisiones totales de EE.UU. proceden de la quema de combustibles fósiles ―como el gas natural, el petróleo y el carbón― para producir electricidad, calentar edificios, propulsar vehículos y otros procesos industriales.
  • Según la Agencia de Protección Medioambiental (EPA), el transporte es el mayor contribuyente a las emisiones de gases de efecto invernadero en EE.UU., representando el 29 % de todas las emisiones en 2018.
  • La mayoría de las emisiones relacionadas con el transporte proceden de turismos y camiones, que producen alrededor del 60 % de las emisiones del sector del transporte.

 

Definición y significado de huella de carbono

La huella de carbono es una forma de medir el impacto de las actividades humanas en el medio ambiente en términos de emisiones de gases de efecto invernadero. Los tres principales gases de efecto invernadero son el dióxido de carbono (CO2), el metano (CH4) y el óxido nitroso (N2O):

  • La quema de combustibles fósiles como el gas natural, el carbón y el petróleo libera CO2 a la atmósfera a niveles significativos.
  • El CH4 se libera principalmente del ganado y de los vertederos.
  • Los fertilizantes, los productos químicos y otros procesos industriales son los principales responsables del N2O.

Estos gases atrapan el calor en la atmósfera terrestre, provocando el calentamiento del planeta. Este proceso se denomina cambio climático y amenaza nuestro planeta y nuestro modo de vida.

 

Una breve historia sobre la huella de carbono

La huella de carbono es un concepto relativamente nuevo, aunque la actividad humana lleva siglos contribuyendo a la emisión de gases de efecto invernadero. Durante el siglo XIX se produjo un aumento espectacular de las emisiones, gracias en parte a la Revolución Industrial y al aumento de la población de las ciudades. Durante este tiempo, el uso de combustibles fósiles para la producción de energía creció en popularidad.

Además, la deforestación que acompañó al desarrollo de ciudades y fábricas aumentó aún más los gases de efecto invernadero. Esto se debe a que los árboles absorben CO2 de la atmósfera, y su eliminación provocó una mayor acumulación de gases de efecto invernadero.

El origen del término "huella de carbono" suele atribuirse a Mathis Wackernagel, un planificador regional de origen suizo, y a William Rees, un ecologista canadiense, cuando escribieron un libro en 1995 titulado Nuestra huella ecológica: Reducción del impacto humano en la Tierra. En él, describían cómo podemos pensar en nuestro impacto sobre el planeta en términos de huella medioambiental, y usaban las emisiones de CO2 como una forma de medir ese impacto.

Cuando se habla de emisiones de carbono, a menudo se usa "CO2" indistintamente de "gases de efecto invernadero." Sin embargo, diversos gases además del CO2 contribuyen al cambio climático —el calentamiento gradual de la temperatura atmosférica de la Tierra— ya que estos gases atrapan el calor en la atmósfera y provocan cambios medioambientales significativos. El término CO2e —abreviatura de dióxido de carbono equivalente— se introdujo recientemente para expresar todos los gases de efecto invernadero como una unidad común. A lo largo de este artículo, se utilizarán los términos "emisiones de carbono", "gases de efecto invernadero" y "CO2e" para describir las emisiones que se tienen en cuenta en el cálculo de tu huella de carbono individual y corporativa.

¿Qué es la eliminación del carbono?

La eliminación de carbono se refiere a cualquier tecnología o enfoque que elimine CO2 de la atmósfera y luego lo almacene de forma que impida que vuelva a liberarse a la atmósfera. La eliminación del carbono es importante porque puede ayudarnos a combatir el cambio climático reduciendo la concentración global de gases atmosféricos de efecto invernadero.

Existen varios métodos diferentes de eliminación del carbono, entre ellos:

  • Captura directa del aire: esta tecnología consiste en capturar el CO2 del aire y almacenarlo bajo tierra.
  • Bioenergía con captura y almacenamiento de carbono (BECCS): este enfoque consiste en quemar biomasa (material vegetal) para generar energía y, a continuación, capturar y almacenar las emisiones de CO2 resultantes.
  • Meteorización acelerada: este método consiste en esparcir rocas trituradas sobre terrenos agrícolas u otros espacios abiertos. A continuación, las rocas reaccionan con el CO2 de la atmósfera para formar nuevos minerales, que se almacenan en el suelo.

Cada uno de estos métodos tiene sus propias ventajas e inconvenientes, y no existe una solución única para la eliminación del carbono.

¿Cómo afecta la eliminación del carbono a nuestro planeta y a nuestro futuro?

La eliminación del carbono puede ayudar a mitigar el cambio climático y sus diversos efectos, como el aumento del nivel del mar, los fenómenos meteorológicos más extremos y la pérdida de hábitats de la fauna. También puede contribuir a mejorar la calidad del aire y los recursos hídricos, así como a crear nuevas oportunidades económicas, como puestos de trabajo en el desarrollo y la implementación de tecnologías de eliminación del carbono.

Hay muchas organizaciones en todo el mundo que trabajan para eliminar el carbono de la atmósfera a través de diversos métodos, como la plantación de árboles, la conservación y restauración de los bosques y la creación de infraestructuras verdes. Algunas de estas organizaciones son:

  • Carbonfund.org
  • The Nature Conservancy
  • Fondo mundial de la vida salvaje (WWF)
  • Natural Resources Defense Council (NRDC)

Organizaciones empresariales como Microsoft también se están sumando al compromiso con los esfuerzos de eliminación de carbono mediante la creación y ampliación de tecnologías de emisiones negativas.

Fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero

Cada decisión que toma una organización —y cada actividad que desarrolla— afecta a la cantidad de CO2 que se emite a la atmósfera. Todos tenemos la responsabilidad de hacer lo que podamos para reducir nuestra huella de carbono y frenar el cambio climático.

Antes de estudiar formas concretas de reducir tu impacto medioambiental y tu huella de carbono, es importante comprender los factores más significativos que contribuyen al cambio climático.

Actividades que aumentan las emisiones de CO2e

Las tres mayores fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero son la quema de combustibles fósiles (carbón, petróleo y gas natural), la deforestación y la agricultura.

 

 

Grandes máquinas en un yacimiento que extraen combustibles fósiles.

Combustibles fósiles

La quema de combustibles fósiles es la principal fuente de emisiones de gases de efecto invernadero a nivel mundial, ya que representa aproximadamente dos tercios de todas las emisiones. Los combustibles fósiles se queman para generar electricidad y propulsar coches, camiones, trenes, barcos y aviones. Cuando estos combustibles se queman, liberan dióxido de carbono (CO2), que es un gas de efecto invernadero.

Vista aérea de un gran campo junto a un bosque.

Deforestación

La deforestación se produce cuando se talan los bosques para dejar paso a la agricultura o al desarrollo. Como parte del proceso de fotosíntesis, los árboles absorben CO2 de la atmósfera y lo usan para producir y liberar oxígeno. Cuando se produce la deforestación, se puede absorber menos CO2 de forma natural, lo que se traduce en una mayor acumulación de gases de efecto invernadero. La deforestación es responsable de cerca del 17 % de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero.

Una persona conduciendo un tractor a través de hileras de cultivos.

Agricultura

Las prácticas agrícolas que implican labrar la tierra o criar ganado también producen metano y óxido nitroso. Estos gases se conocen colectivamente como emisiones agrícolas de gases de efecto invernadero. En términos de su efecto sobre el cambio climático, el metano es unas 25 veces más potente que el CO2, y el óxido nitroso es unas 300 veces más potente. Cabe destacar que la ganadería es responsable del 14 % de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero.

Cómo reducir la huella de carbono

Comprender el impacto de tu huella de carbono es un paso importante para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, una de las principales causas del cambio climático. La buena noticia es que hay muchas formas de reducir tu huella de carbono individual y contribuir a un futuro más sostenible. Mientras que algunas personas abogan por reducir la dependencia de la sociedad de los combustibles fósiles y por la transición a una energía 100 % renovable, otras creen que incluso pequeños cambios en nuestra vida cotidiana nos aportarán grandes beneficios.

Por ejemplo, las personas pueden empezar por hacer cambios sencillos en su estilo de vida, como ahorrar energía, reciclar y elegir productos respetuosos con el medio ambiente. A nivel organizativo, podemos poner en marcha iniciativas de eliminación de carbono, así como abogar por cambios en las políticas, invertir en energías renovables y apoyar a las empresas que trabajan para reducir su propia huella de carbono.

En este informe de impacto económico, se explica cómo diferentes industrias están tomando medidas pragmáticas para descarbonizar sus operaciones. Profundiza en por qué las empresas son una fuerza poderosa para frenar el cambio climático y cómo las industrias manufacturera, de servicios financieros, minorista y energética pueden liderar el camino.

 

 

¿Por qué es importante reducir la huella de carbono?

Los científicos llevan años advirtiéndonos de que tenemos que tomar medidas para atajar el cambio climático, y la oportunidad de hacerlo se está cerrando rápidamente. Para evitar los efectos más catastróficos del cambio climático, debemos reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 45 % respecto a los niveles de 2010 para el año 2030, con el objetivo de alcanzar lasemisiones netas cero en 2050.

Reducir tu huella de carbono es una de las cosas más poderosas que puedes hacer para ayudar a combatir el cambio climático. Al producir menos CO2e, puedes ayudar a reducir la cantidad total de estos gases en la atmósfera y contribuir a frenar el calentamiento global.

Además, reducir tu huella de carbono puede mejorar tu propia salud y la de los que te rodean. Por ejemplo, si caminas o vas en bici en lugar de conducir, producirás menos emisiones, lo que redundará en una mejor calidad del aire. Y puesto que la exposición a la contaminación atmosférica se ha relacionado con una serie de problemas de salud —como infecciones respiratorias y enfermedades cardíacas—, hacer lo que puedas para reducir las emisiones puede tener un impacto real y positivo en tu comunidad.

Aunque hay muchas formas de reducir la huella de carbono de tu empresa, como cambiar a energías renovables o ser más eficiente en el uso de los recursos, al final tendremos que eliminar el carbono de la atmósfera si queremos estabilizar el clima. Aquí es donde entra en juego la eliminación del carbono.

¿Cómo pueden las grandes empresas reducir su huella de carbono?

Algunas de las formas en que las empresas y organizaciones pueden reducir su huella de carbono son:

  • Mejorar la eficiencia energética

    Las medidas de eficiencia energética pueden ayudar a las empresas a ahorrar dinero consumiendo menos energía y reduciendo al mismo tiempo las emisiones. Algunos ejemplos de medidas de eficiencia energética son el cambio a opciones de iluminación más eficientes, la instalación de paneles solares y el uso de electrodomésticos de bajo consumo.

  • Compensar tus emisiones

    Al igual que los REC, las compensaciones son una forma de que las empresas reduzcan su huella neta de carbono invirtiendo en proyectos que eliminen los gases de efecto invernadero de la atmósfera. Por ejemplo, una empresa puede invertir en un proyecto que plante árboles, que absorben CO2.

  • Utilización de energías renovables

    Las fuentes de energía renovables, como la solar, la eólica y la hidráulica, generan electricidad sin apenas emisiones de gases de efecto invernadero. Las empresas pueden utilizar software de administración del carbono con energía renovable para alimentar sus operaciones.

  • Reducción de residuos

    La producción de bienes genera una cantidad importante de residuos en todo el mundo. Algunas formas de reducir los residuos son recuperar y reciclar materiales, elegir envases más respetuosos con el medio ambiente, mejorar la eficiencia de la producción y aplicar un mantenimiento preventivo de los equipos, por nombrar algunas.

  • Certificados de Energías Renovables (CER)

    La compra de REC ayuda a las empresas a compensar sus emisiones invirtiendo en proyectos de energías renovables. Cuando compras un REC, estás apoyando el desarrollo de fuentes de energía renovables, como la solar, la eólica y la hidráulica.

¿Qué medidas puedo tomar para reducir mi huella de carbono individual?

Los individuos también pueden tomar medidas para reducir su huella de carbono, como por ejemplo:

  • Consumir menos energía en casa

    Algunas ideas para reducir el consumo de energía en casa son utilizar bombillas LED, desenchufar los aparatos electrónicos cuando no se utilicen y ajustar el termostato unos grados más bajo en invierno y más alto en verano.

  • Comer menos carne

    Como ya se ha dicho, la ganadería es una fuente importante de emisiones de gases de efecto invernadero. Puedes ayudar a reducir estas emisiones comiendo menos carne, o eligiendo carne procedente de animales criados de forma más sostenible.

  • Conducir menos

    Puedes reducir tu huella de carbono compartiendo coche, cogiendo el transporte público, yendo en bici o andando.

  • Reciclaje y compostaje

    Reciclar, compostar y evitar los productos de un solo uso ayuda a mantener los residuos y materiales fuera de los vertederos, donde se descomponen lentamente y liberan metano, un potente gas de efecto invernadero.

¿Cuáles son las ventajas de reducir la huella de carbono de mi organización?

Reducir la huella de carbono de tu empresa tiene muchas ventajas. Si tomas medidas para reducir las emisiones globales de tu organización, puedes ayudar a proteger el medio ambiente y mejorar tu cuenta de resultados. Aparte de los efectos obvios de reducir la huella de carbono de tu empresa -a saber, ayudar a combatir el cambio climático-, hay otras ventajas a tener en cuenta:

  • Reducción de los costes de funcionamiento: mejorar tu eficiencia energética puede ayudarte a ahorrar dinero en tus facturas de la luz. Además, generar tu propia energía significa que no estás a merced de los fluctuantes precios de la energía.
  • Posición de mercado más fuerte: muchos de los consumidores actuales están interesados en apoyar a las empresas que toman medidas para reducir su impacto sobre el medio ambiente. Reducir la huella de carbono de tu empresa puede ayudarte a atraer y retener clientes.
  • Mayor eficiencia: al reducir tu dependencia de los combustibles fósiles, tu empresa puede evitar los cortes de energía y los periodos de inactividad, con lo que será más eficiente. Esto puede suponer un ahorro de costes adicional, así como una reducción del impacto medioambiental.
  • Mejora de la imagen pública: la reputación de una empresa es importante para su éxito general. Los esfuerzos de sostenibilidad que ayudan a reducir tu huella de carbono pueden contribuir a reforzar tu reputación entre consumidores, empleados, inversores y la comunidad en general.
  • Reducción del riesgo: a medida que los efectos del cambio climático se hagan más evidentes, las empresas que no hayan tomado medidas para reducir sus emisiones estarán en desventaja competitiva. Reducir tu huella de carbono puede ayudar a tu empresa a ir por delante y evitar esos riesgos.

El cambio climático es un problema mundial y —dado su impacto a gran escala— las empresas tienen la responsabilidad de sumarse al compromiso por un futuro más sostenible. Tu organización puede establecerse como líder en sostenibilidad y servir de ejemplo a otras empresas y particulares.

En última instancia, la decisión de reducir tu huella de carbono es sabia tanto para el medio ambiente como para el balance final de tu organización. Reduciendo tu consumo de energía y minimizando los residuos, contribuirás a preservar nuestro planeta para las generaciones futuras, y a la vez ahorrarás dinero a largo plazo.

Soluciones para la huella de carbono

No importa en qué punto de tu viaje hacia la sostenibilidad te encuentres, las soluciones tecnológicas basadas en la nube pueden ayudarte a avanzar. Estas tecnologías innovadoras ayudan a reducir la huella de carbono de tu empresa y apoyan la transición mundial hacia una energía más limpia:

 

 

Una persona trabajando con una tableta en una oficina.

Microsoft Cloud for Sustainability

Obtén la información que necesitas para registrar, informar y reducir tu impacto medioambiental.

Un campo de paneles solares y el perfil de una ciudad a lo lejos.

Panel de impacto de emisiones

Recopila y conecta datos en la nube para comprender mejor tu huella medioambiental.

Una persona trabajando en un equipo cuántico.

Informática cuántica

La computación cuántica está preparada para acelerar la resolución de problemas relacionados con el cambio a fuentes de energía renovables como la solar, la hidráulica, la eólica y la geotérmica.

El compromiso de Microsoft para reducir nuestra huella de carbono

Microsoft se compromete a lograr un futuro más sostenible reduciendo su huella de carbono, acelerando la investigación, ayudando a sus clientes a crear soluciones sostenibles y abogando por políticas que beneficien al medio ambiente. Para 2030 Microsoft será carbono negativo, y para 2050 Microsoft eliminará del medio ambiente todo el carbono que la empresa ha emitido directamente o por consumo eléctrico desde su fundación en 1975.

Ver un vídeo para obtener más información

Reducir la huella de carbono

Prueba el Panel de Impacto de Emisiones de Microsoft para obtener transparencia sobre el impacto del carbono de tu utilización de la nube y ayudarte a medir tu potencial de ahorro de carbono.

Preguntas más frecuentes

  • La huella de carbono es una medida del impacto medioambiental -en términos de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) liberadas a la atmósfera- creado por una persona, organización u otra entidad. El término "carbono" se refiere a cualquier cantidad de dióxido de carbono liberada como consecuencia de la combustión de combustibles fósiles como el gas, el petróleo y el carbón. El aumento actual de la temperatura media de la Tierra se debe principalmente a este aumento de las concentraciones atmosféricas de GEI.

  • Reducir tu huella de carbono es un paso importante para frenar el cambio climático y crear un futuro más sostenible. Estas son algunas maneras de reducir la huella de carbono:

    • Conducir menos. Considera la posibilidad de utilizar el transporte público, compartir el coche o ir en bicicleta cuando sea posible.
    • Reducir el uso de energía. Apaga las luces, desenchufa los aparatos electrónicos cuando no se utilicen y cambia a luces y electrodomésticos de bajo consumo.
    • Comer de forma sostenible. Reducir la cantidad de productos animales que consumes es una de las formas más eficaces de reducir tu huella de carbono. La simple sustitución de la carne de vacuno por la de pollo reduce las emisiones relacionadas con la alimentación en un 75%. Además, comprar alimentos cultivados localmente ayuda a reducir las emisiones asociadas al transporte.
    • Compra con prudencia. Compra artículos usados en la medida de lo posible, ya que los productos nuevos requieren recursos adicionales para su fabricación.
    • Evita los plásticos de un solo uso. Una forma de reducir tu huella de carbono es reducir los residuos. Opta por botellas de agua rellenables, bolsas de la compra y recipientes de almacenamiento reutilizables, y envases compostables siempre que sea posible.
    • Invertir en fuentes de energía ecológicas. Busca proveedores de energía limpia -por ejemplo, los que utilizan energía eólica o solar en lugar de depender de combustibles fósiles- si están disponibles en tu zona.
  • Reducir tu huella de carbono es un paso importante para mejorar la salud pública y preservar el planeta para las generaciones presentes y futuras. Las emisiones de carbono producidas por actividades humanas como la quema de combustibles fósiles, la deforestación y la agricultura industrial contribuyen al calentamiento global, la contaminación atmosférica, la acidificación de los océanos, la degradación medioambiental, la inseguridad alimentaria, la escasez de agua y los fenómenos meteorológicos extremos.

  • Hay muchas cosas que contribuyen al tamaño de tu huella de carbono. Algunos ejemplos son:

    • Uso de la energía y dependencia de combustibles fósiles como el carbón, el petróleo y el gas natural.
    • Elecciones alimentarias, como cuánta carne y alimentos envasados consumes.
    • Consideraciones sobre el estilo de vida, por ejemplo, cuántos aparatos electrónicos utilizas, ya que éstos suelen contener materiales cuya extracción requiere muchos recursos, y tus hábitos de consumo.
    • Las preferencias de transporte —por ejemplo, si conduces a diario, utilizas el transporte público, vuelas con frecuencia o vas a pie o en bicicleta con regularidad— afectan significativamente al tamaño de tu huella de carbono.
  • El nivel de emisiones de carbono de cada persona varía mucho en todo el mundo, y los habitantes de los países más desarrollados producen mayores huellas de carbono. En comparación con la media mundial, Estados Unidos tiene una gran huella de carbono. En 2021, los residentes tenían una producción per cápita de 14,24 toneladas métricas de CO2 equivalente, lo que es más de tres veces superior a la media mundial. Ese mismo año, la huella de carbono per cápita de Francia fue de 4,58 toneladas métricas, mientras que la de Brasil y Tanzania fue mucho menor: 2,28 toneladas métricas y 0,21 toneladas métricas, respectivamente.

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